Cada 11 de noviembre los eslovenos celebran el Martinovanje o Martinovo. De hecho, en todo el país los amigos y la familia se juntan a comer y a beber en esta celebración que se mantiene desde tiempos lejanos. Ya sea disfrutar de comidas tradicionales en las áreas rurales o de juntarse a beber vino en las residencias estudiantiles de Liubliana, el espíritu de la festividad se mantiene.
Si bien el nombre de la festividad evoca a la Iglesia (San Martín el patrono del vino), en verdad se trata de una celebración pagana en sus orígenes. Pues en las fiestas y celebraciones de otoño, nuestros ancestros agradecían por las buenas cosechas y pedían abundancia para el año próximo.
Durante el Martinovanje la tradición consiste en reunirse a comer castañas asadas y a probar los vinos tempranos que luego descanzarán en las bodegas para su posterior consumo.
En algunas ciudades como Ormož el evento se convierte en un verdadero festival con actividades artísticas y culturales que dura semanas.
Estudiantes eslovenos festejando Martinovanje |
Si bien el nombre de la festividad evoca a la Iglesia (San Martín el patrono del vino), en verdad se trata de una celebración pagana en sus orígenes. Pues en las fiestas y celebraciones de otoño, nuestros ancestros agradecían por las buenas cosechas y pedían abundancia para el año próximo.
Durante el Martinovanje la tradición consiste en reunirse a comer castañas asadas y a probar los vinos tempranos que luego descanzarán en las bodegas para su posterior consumo.
En algunas ciudades como Ormož el evento se convierte en un verdadero festival con actividades artísticas y culturales que dura semanas.